La Realidad Aumentada (AR) y la Realidad Virtual (VR) son dos tecnologías inmersivas que han revolucionado la forma en que interactuamos con el mundo digital y físico aunque son conceptos distintos, ambos comparten el objetivo de proporcionar experiencias envolventes y atractivas para los usuarios.
Realidad Aumentada (AR)
La Realidad Aumentada combina elementos virtuales con el mundo real. Es una tecnología que permite superponer imágenes, objetos 3D, información o gráficos generados por computadora en el entorno físico que nos rodea.
Esto se logra a través de dispositivos como teléfonos inteligentes, tablets, lentes inteligentes u otros dispositivos portátiles.
Algunos ejemplos comunes de AR incluyen aplicaciones que permiten probarse ropa virtualmente, visualizar muebles en una habitación antes de comprarlos, agregar filtros divertidos a las fotos en redes sociales, o utilizar indicaciones de navegación en tiempo real mientras caminas por la ciudad.
Realidad Virtual (VR)
La Realidad Virtual es una tecnología que sumerge completamente al usuario en un mundo virtual generado por computadora. Los usuarios utilizan dispositivos específicos, como auriculares o gafas de VR, para interactuar con este mundo simulado y experimentarlo como si estuvieran realmente dentro de él.
La VR ofrece una amplia variedad de aplicaciones, desde entretenimiento y juegos inmersivos hasta entrenamiento y simulaciones en entornos de aprendizaje. Con esta tecnología, los usuarios pueden explorar mundos imaginarios, vivir experiencias emocionantes, practicar habilidades o enfrentar situaciones realistas sin salir de su ubicación física.
Diferencias clave entre AR y VR:
Interacción con el mundo real: Mientras que la AR agrega elementos virtuales al mundo real, la VR aísla al usuario en un mundo completamente virtual.
Grado de inmersión: La VR ofrece una experiencia más inmersiva, ya que el usuario se siente completamente sumergido en el mundo virtual. En cambio, la AR permite que el usuario siga interactuando con su entorno real.
Dispositivos requeridos: La AR generalmente se experimenta a través de dispositivos móviles como smartphones o tablets, mientras que la VR requiere dispositivos específicos de VR, como auriculares o gafas.